viernes, 23 de junio de 2023

El fin de las redes sociales

Dejo las redes sociales. La respuesta para mí a la pregunta de "¿porqué lo haces?" es sencilla, pero hacerla entender creo que es dificil para personas que las usan a diario.

Para empezar hay que entender que soy una persona altamente sensible e introvertida, lo que significa que me saturo de otras personas, a veces hasta de mi mismo, y necesito aislarme para recuperar energías. No energias en plan mistico, sino que no me dan ganas de levantarme de la cama. Una de las razones sería que tengo gente dentro de mi casa desde primera hora si abro las redes sociales.

Llevo así desde tuenti (vaya viejo que soy ya) hasta Instagram, pasando por twitter y Facebook. Y en todas he terminado saturado y saliendome de ellas. Actualmente tengo Instagram y me lo hice para conectar con gente aficionada a juegos de mesa, y luego me hice la cuenta personal, craso error. El que mucho abarca poco aprieta, así que fui dejando la cuenta de juegos de mesa para centrarme en mi propio narcisismo. Entonces pasé todas mis frikadas, y mis escritos, y mi vida personal, a Instagram y Facebook.

Poco a poco, deje de publicar, en parte porque veía que yo no interesaba a la gente, y en parte porque me desmotivé, no creía que tuviera algo que contar. Creo que no soy el único que vió venir el auge del postureo: "Me como una paella: foto. Me tomo una cerveza: foto. Me rasco un huevo: foto. Voy a cagar: foto." Aprendí que puedo ver la vida de los demás, o al menos lo que me quieran contar, sin necesidad de dar nada. Es perfecto tanto para los narcisistas que se lucen y obtienen un puñado de likes, como para los voyeurs como yo que nos permitía enterarnos de la vida de los demás sin estar obligados a dar nada a cambio. Ahí me di cuenta de que me agobiaba ver a todo el mundo haciendo cosas, y yo mientras, en mi casa haciendo lo que pensaba que tenía que hacer, que era estar sentado en el sofá. 

Por otro lado,con la llegada de tik-tok todas las redes intentaron imitar a esta, con vídeos cortos y publicaciones de personas que no sigo, con contenido que la propia red cree que me interesa pero solo me hace perder el tiempo.

Además, cada vez me daba mas cuenta de que prefiero que mi intimidad se quede conmigo, sin compartir. Ya de por si soy tímido, introvertido ¿Para que voy a mostrarme a personas que casi ni conozco? No tiene sentido. Solo me gusta mostrarme a gente que me da confianza y a la cara.

Por todo esto, dejo redes sociales. Dejó de tener el sentido que yo les di. Me satura. Me hace perder el tiempo.

Para equilibrar el cerrar cosas y dejar de socializar tan a lo bestia, abro este blog, donde escribiré sobre lo que se me pase en ese momento por la cabeza. No puedo tematizarlo ya que se me pasan muchísimas cosas, va a ser una especie de diario, donde pongo vivencias, teorías locas, escritos, frikadas y de todo. Esto se contradice con lo que dije anteriormente con que no me gusta mostrarme a gente que no conozco, pero hay una diferencia: en las redes sociales no se mete la gente por un interés real, sino por puro cotilleo, algo superficial. La prueba la tengo con el éxito de mis publicaciones de estas redes en viajes y el fracaso a la hora de subir libros, cosa que no entiendo. Quien se meta en este blog será por un interés real, y aunque no este cerca de la persona, o no la conozca, se que de verdad le va a interesar, aunque a veces divague o hable de temas que poco tienen que ver con lo que le ha traído a este blog. Simplemente porque tiene que salir de esas redes y meterse por aquí ya es un esfuerzo a día de hoy.

Sin mas, me despido diciendo que por aquí no me voy a cortar, me voy a quedar bien a gusto, y quien quiera que se pase, y comente ya de paso 😁, y quien no pues nada.